El pasado fin de semana teníamos un reto pendiente: completar los 101 km celebrados en Ronda.
Disponíamos de 24 horas para recorrer un itinerario de 101 kilómetros que pudimos finalizar gracias al esfuerzo y el sacrificio que veníamos realizando durante varios meses con nuestros entrenamientos.
Tanto en los kilómetros que hicimos a pie como los que pedaleamos en nuestras bicicletas,estuvimos en todo momento expuestos a una mezcla explosiva de sensaciones:nerviosismo,euforia,cansancio,agotamiento,alegría.., todas ellas destinadas a conseguir nuestro objetivo y finalizar con éxito la prueba.
Qué decir del éxtasis que sentimos cuando llegamos a la meta y vimos que habíamos terminado la prueba con dedicación, esfuerzo, sufrimiento, alegría…
En definitiva, es un momento que todos los que lo hemos experimentado, coincidimos en que es “para vivirlo” ya que, de repente, nos olvidamos de nuestros dolores físicos, del calor, del cansancio, de la fatiga psicológica y nos embarga una gran alegría por haber alcanzado nuestro objetivo.
Destacar en todo momento el compañerismo demostrado por las personas que participaron y por toda la organización de la prueba.
Sin duda un gran día en el que el deporte,una vez más,fue el protagonista.
Nosotros por nuestra parte,entrenando ya para superarnos en la próxima edición.
